Quizá una de las historias menos conocidas de la Batalla de Inglaterra sea la de la participación de unidades italianas junto a la Luftwaffe. También quizás sea uno de los casos más grotescos de la historia de los combates aéreos. Benito Mussolini, creyendo que Luftwaffe iba a obtener una nueva victoria sobre los aislados ingleses y su aviación, decidió participar con sus aviones en el momento calculado de la inminente derrota, y así exigir su parte del pastel, tal como había sucedido en Francia unos meses antes. Pero esta vez las cosas no salieron como se esperaba, y esta vez la Luftwaffe fue derrotada. Pero lo que está claro es que para la Regia Aeronáutica Italiana aquellas operaciones del otoño de 1940 supusieron un ridículo fracaso, que desgraciadamente se veía venir incluso por sus sufridas tripulaciones…