Dos interesantes efemérides aeronáuticas se cumplen hoy día 2 de agosto. Un día como hoy pero de 1936, fallecía en París uno de los más famosos y reconocidos pioneros de la aviación, el francés Louis Charles Joseph Blériot. Como constructor, diseñó el famosísimo Blériot XI, un monoplano que estableció la fórmula clásica de la hélice de tracción y que lo convirtió además en héroe nacional, cuando el 25 de julio de 1909 se convirtió en el primer aviador en cruzar el Canal de la Mancha. Esta hazaña le aportó fama y dinero, convirtiéndose posteriormente incluso en presidente del gran consorcio aeronáutico francés S.P.A.D. (Société pour l’Aviation et ses Deriveés) constructor de famosos aeroplanos de combate durante la Primera Guerra Mundial, tales como los SPAD S.VII y S.XIII.
También un 2 de agosto, pero de 1947, se producía una de las más enigmáticas desapariciones de la historia de la aviación, cuando un Avro 691 Lancastrian (un derivado civil del famoso bombardero Avro Lancaster) de la compañía británica British South American Airways (BSAA) matrícula G-AGWH y bautizado como Star Dust se perdió en los Andes argentinos cuando se dirigía a Santiago de Chile, tras radiar un extraño mensaje en código Morse que aún no ha podido ser aclarado: S.T.E.N.D.E.C. El propio avión se esfumó y ningún equipo de rescate fue capaz de encontrarlo durante casi 50 años, hasta la fortuita aparición de algunos restos en 1998 en las laderas del glaciar del Tupungato por parte de un guía de montaña. Posiblemente el accidente se produjera a causa de un grave error de navegación, pero se han escrito muchas páginas acerca de la extraña desaparición del cuatrimotor y el enigmático mensaje que radió, y son muchas las hipótesis, desde las más sensatas hasta las paranormales, las que giran en torno al Star Dust: extrañas conspiraciones, truculentas historias de espías e incluso abducciones OVNI…